Preguntas y respuestas

La mayor parte de Japón se encuentra en zonas templadas, pero el archipiélago cuenta con una gran variedad de climas debido a su amplia extensión geográfica: desde los territorios nórdicos de Hokkaido hasta las islas meridionales de Okinawa. Además, aquellos viajeros dispuestos a salirse de las rutas más transitadas podrán encontrar regiones que gozan de temperaturas muy benignas durante todo el año.

Cada estación del año tiene su propio encanto, por lo que siempre es buen momento para descubrir Japón: al igual que los colores y los motivos de los kimonos se adaptan a la época del año y cambian con el paso de las estaciones, la cultura japonesa, influida por una naturaleza de contrastes, florece en todo momento y puede apreciarse durante todo el año. Entonces, ¿qué época del año elegir para visitar Japón? A continuación encontrará una breve relación de algunas de las peculiaridades y atractivos que ofrece Japón durante cada estación, que le ayudará en su elección.

• La estación más popular para visitar Japón es la primavera, pues es cuando se puede admirar la floración de los miles de cerezos japoneses, cuyos pétalos revolotean en el viento y tapizan el suelo. Tomar un vaso de sake mientras se come algo tendido en la hierba es una experiencia inolvidable. El inicio de la floración de los cerezos abarca desde finales de marzo (en el sur de Japón) hasta mediados de mayo (en el extremo norte del país).
• El verano es una estación especialmente festiva, asociada con la danza y los fuegos artificiales. La mayoría de los festivales locales y regionales se celebran durante el verano. Es en esta estación cuando se puede ver el Gion Matsuri y el Jidai Matsuri de Kyoto, las danzas Awa Odori de Tokushima o los desfiles de carrozas iluminadas del Nebuta Matsuri de Aomori. Muchos otros festivales tienen también lugar en verano, como el Soma Nomaoi, en el que se recrea una batalla sucedida hace 1.000 años, o el Gran Festival de Verano de Tokyo, donde durante todo un mes la música es la protagonista. El verano japonés es muy soleado, a excepción del monzón del mes de junio y de principios de julio y los tifones que se producen desde finales de agosto a septiembre. Para aquellos que no gusten del calor y la humedad, existe la posibilidad de descubrir la región septentrional disfrutando de un frescor ideal.
• La belleza de las hojas de arce o de ginkgo, que adoptan tonos rojizos y dorados con el sol de otoño, puede admirarse de octubre a noviembre. Así, el paisaje japonés se va transformando poco a poco desde el Norte hasta el Sur. Hablamos de la bella estación en se realiza la "búsqueda de hojas otoñales", o Momijigari, práctica similar al hanami, que consiste en la admiración de las flores de cerezo en primavera. El otoño invita a pasear por los jardines, templos y montañas, a bañarse en la magia de la luz otoñal y a disfrutar del aire puro.
• El invierno es la época ideal para disfrutar de los miles de baños y termas japoneses: descubrir el noroeste del país, donde la nieve da forma a paisajes de ensueño, mientras se toma un baño al aire libre inmersos en una fuente termal natural es un placer incomparable. Si decide hacer un alto en un ryokan, podrá descubrir también los deliciosos platos de invierno japoneses (cangrejo gigante, fugu, cocido japonés, etc.). No hay nada como una buena comida después de un baño, y más aún cuando se acompaña con una excelente cerveza japonesa. Además, podrá disfrutar de unos precios atractivos debido a que todavía no muchos viajeros son conocedores de estos pequeños placeres.